Supongo que todo el mundo ha visto alguna vez una rueda girando en el sentido contrario al que se supone que debería girar. Incluso hay veces que está girando normal, se para y empieza a girar para el lado contrario. Esto pasa mucho en los coches, ya sea en anuncios como en la vida real ¿Qué es lo que pasa? ¿realmente gira en sentido contrario o es nuestro ojo el que nos la está jugando?
Pues me temo que es lo segundo. Para explicarlo vamos a poner un ejemplo.
Imaginad que hay una persona dando vueltas en círculos alrededor de una columna. La columna es tan grande que tarda 10 segundos en dar una vuelta completa y llegar al mismo sitio. Por otro lado, nosotros lo estamos mirando, pero la luz está apagada y solo se enciende un instante cada cierto tiempo. Muy bien, pues vamos a ver las distintas cosas que vemos en función de la frecuencia a la que se enciende la luz.
CASO 1: Abrimos cada 10 segundos: Como es lo que tarda el tipo en volver a su posición, siempre lo veríamos en en mismo sitio y, por lo tanto, pensaríamos que no se mueve.
CASO 2: Los abrimos cada 11 segundos: Veríamos que el tipo avanza, pero pensaríamos que lo hace muy lento, porque en 11 segundos ha avanzado muy poquito (lo que en realidad él avanza normalmente en 1 segundo)
CASO 3: Los abrimos cada 9 segundos: Al tipo no le habría dado tiempo a dar una vuelta completa, lo veríamos 1 segundo antes de que llegara a la posición donde lo vimos por última vez y, por lo tanto, nos daría la sensación de que el hombrecillo está andando hacia atrás.
Por tanto, si iluminamos con una luz que tenga una frecuencia (en el sentido que hemos descrito anteriormente, es decir, que se encienda y apague X veces por segundo) igual a la del movimiento de rotación, nos parecerá que el objeto está parado (incluso podríamos leer cosas que tuviera escritas), si la frecuencia de la luz es un poco menor, nos parecerá que el objeto se mueve en su sentido original de giro, pero muy lentamente (en relación a su velocidad real) y, por último, si la frecuencia de la luz es un poco mayor, nos parecerá que el objeto rota en dirección contraria.
Sí, sí, todo esto está muy bien, ¡pero nosotros queremos pruebas! Pues aquí las tenéis:
La idea de que giren o no en función de la luz con la que se ilumina es por el hecho de que sus frecuencias son diferentes (la que permite verlo es luz estroboscópica, es decir, una luz que parpadea, exactamente igual que las de las discotecas, pero mucho más rápido, claro).
Pero esto no solo ocurre por la luz que ilumina. Todos los receptores de luz la captan a un ritmo determinado, así que, ¿qué pasa si algo gira con la misma frecuencia con la que una cámara capta el movimiento? Pues que pasan cosas como esta: Helicópteros que vuelan “sin que sus aspas giren”
Y por último, ¿qué pasa si la frecuencia coincide con la que nuestro ojo puede captar las imágenes? Pues que entonces, nosotros mismos veremos que una rueda pueda girar más lento de lo que parece, estar parada o incluso ir para atrás. Aquí lo tenéis:
(Estad atentos porque se ve muy poco tiempo, es sobre el minuto 0:40, casi al final)
Pues nada, eso ha sido todo, espero que os haya gustado.
¡Hasta luego!
muy interesante :)
ResponderEliminarMe encanta!!!!
ResponderEliminarAdemás lo he entendido perfectamente (¡bien por mí!)!!
Un beso! :)